Hola, me llamo Susana y soy una alcohólica. Creo.

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Para mis amigos irlandeses soy un peso pluma. Para mis amigos españoles soy una borracha. Bebo la misma cantidad independientemente de con quién esté. 

¿Quién tiene la razón, pues?

La verdad es que tanto si soy una alcohólico o no - personalmente, lo dudo mucho - sí que me he dado cuenta recientemente que el alcohol es la raíz de muchos de mis problemas personales. O al menos, los empeora.

Es por esto que he decidido tomar riendas en el asunto y romper el ciclo. 

He decidido dejar de beber socialmente y me he prometido a mi misma sólo tomar un baso de vino de vez en cuando si es acompañado de comida.

Me reto a mí misma a hacer esto durante un año, un día a la vez. 

Veámos qué sale de bueno.

Hola, me llamo Susana y soy una alcohólica. Creo. 

Día 2 de 365.